Tres partidos desde que regresó al Santos… y aún no conoce la victoria. Neymar Jr. sigue sin poder marcar las diferencias en su vuelta al fútbol brasileño. De momento, no contabiliza ningún gol y ninguna asistencia.
A los dos empates decepcionantes, ahora se suma una derrota amarga en el clásico ante el Corinthians (2-1), que reduce peligrosamente las opciones del Peixe de clasificarse para los cuartos de final del Campeonato Paulista.
Eso sí, la actuación de Neymar Jr. fue lo único positivo de un Santos vulgar e inofensivo. El crack brindó sus minutos de más alto nivel con la camiseta ‘10’ santista, que incluyó, por fin, varios de los regates de su exquisito repertorio.
Esbozó una progresión en su largo proceso de reencontrarse como futbolista que le llevará varios meses. Más dinámico y enchufado entró en el clima de un partido de la máxima jugado en el hervidero de la Neo Química Arena, el escenario con más presión ambiental del fútbol brasileño.
A pesar de sus buenas intenciones, el crack frenó en las propias limitaciones de su equipo, que, a la espera de poder contar con sus últimos refuerzos (como los delanteros Gabriel Veron y el argentino Benjamín Rollheiser) y otros que vendrán, volvió a mostrarse demasiado limitado. Nadie acompañó a Neymar.
Este Santos, que en 2024 transitó por la Serie B del Brasileirao, es un conjunto blando en la contención, sin jerarquía para gobernar los encuentros desde la medular.
Los planteamientos futbolísticos del técnico portugués, Pedro Caixinha, pueden ser muy loables, pero, en esta primera fase de la temporada, no han cuajado, tal vez por falta de material humano de calidad.
Y quien, en esta ocasión, lo acabó pagando fue Ney, que dio pasos relevantes en su puesta a punto, tras el nefasto partido del domingo ante el Novorizontino (0-0).
Jugó 67 minutos y cumplió, aunque no logró tener incidencia en el marcador. Cuando se retiró, el Peixe se aprovechó de la relajación del Timao para maquillar el marcador con un tanto de Guilherme, que ya contabiliza ocho y es el artillero del torneo
Al Corinthians, por su vez, sigue a lo suyo, sin preocuparle lo más mínimo los dilemas existenciales de los santistas. Viene lanzado en este 2025 por su espectacular final de temporada cuando terminó el Brasileirao encadenando nueve victorias seguidas. Y fue netamente superior, principalmente en el primer tiempo, en que mató el clásico con un doblete de un gran Yuri Alberto, que ya había marcado en este Paulista en el derbi contra el Palmeiras (1-1).
El ‘9’ corinthiano, que fue resolvió con gran estilo, se vio beneficiado, un encuentro más, de la sociedad que conforma con Memphis Depay, que jugó con garra y eficacia, empujado por una ‘torcida’ que lo idolatra.
Sin todo el frenesí que provocó su desembarque en el Santos, Neymar Jr. regresará a la Vila Belmiro el domingo para medirse al Agua Santa, con el objetivo de ratificar que las buenas sensaciones que transmitió en la Neo Química Arena pueden mostrar una tendencia positiva sostenible.
