Neymar Jr. encara este domingo un clásico con consecuencias que servirá para sacar conclusiones definitivas en su primer mes en el Santos. El crack, que el viernes fue convocado para jugar con Brasil la fecha FIFA de marzo, liderará al Peixe en el reto de intentar derrotar en casa al Corinthians, en una semifinal a partido único, para alcanzar la final del Campeonato Paulista 2025. La cita es a las 18:30, horario local (22:30, hora peninsular española).
A Ney se le ve muy a gusto. “Ellos tienen más miedo de mí que yo de ellos”, provocó después de eliminar al Red Bull Bragantino (2-0) en un partido de cuartos de final en el que marcó de falta directa.
Ya ha habido un precedente este año entre los dos equipos, en el mismo escenario y con Neymar con la ’10’ del Peixe. Santos perdió 2-1 en un mal partido colectivo, pero con su astro ofreciendo los mejores minutos desde que regresó a su país para intentar relanzar su carrera. Esta es la única derrota en esta nueva etapa en el club donde se formó.
Hay optimismo entre los santistas, que apelan al ‘factor Neymar‘, decisivo en los cinco últimos goles del equipo, fabricados en acciones a balón parado en las que el exblaugrana ha marcado dos veces (uno de ellos fue el primer gol olímpico de su carrera) y ha dado dos asistencias.
A Neymar todo le está saliendo de cara. Está dejando atrás el calvario de su etapa en el Al-Hilal y la lesión en el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda que lo dejó un año KO.
Ha sido capaz de enlazar seis encuentros consecutivos en un mes, en los que ha marcado tres goles y ha dado tres asistencias. Su presencia ha coincidido con una evolución colectiva del equipo que dirige el portugués Pedro Caixinha. Y las puertas de la Seleção vuelven a estar abiertas para él. En marzo jugará contra Colombia y Argentina.
El Corinthians, en cambio, llega muy tocado y en medio de una crisis interna de consecuencias inciertas después del naufragio en Guayaquil ante el Barcelona (3-0) en la ida de la última eliminatoria previa a la fase de grupos de la Copa Libertadores.
El Timão está al borde del precipicio. De hecho, el miércoles necesitará una remontada histórica en la Neo Química Arena si no quiere despedirse anticipadamente de las competiciones continentales en este 2025.
Su técnico, el argentino Ramón Díaz, transita por el alambre. Se le ha terminado el crédito. Y, si cae eliminado contra el Santos, nadie se extrañaría de que sea fulminado. La presión es máxima.
En Guayaquil, el ambiente estaba tan caldeado que Memphis Depay, estrella mediática de este proyecto deportivo, llegó a las manos con el central Gustavo Henrique. Según la prensa paulista, incluso voló alguna silla en su encontronazo.
Este sábado, representantes de las ‘torcidas organizadas’ (o sea, los grupos ultras) estuvieron en el centro de entrenamiento del Corinthians para reunirse con representantes de la plantilla y exigirles compromiso, raza y resultados en los partidos contra el Santos y el Barcelona, que marcarán el primer semestre del año.
La otra semifinal del Paulista la disputarán Palmeiras y São Paulo el lunes por la noche, en el que será el debut de Vitor Roque con su nuevo equipo.
