El triunfo de Boca Juniors ante River Plate (3-2) en los cuartos de final, a partido único, de la Copa de la Liga será recordado, más allá de los tres tantos uruguayos del Xeneize (doblete de Merentiel, más otro de Cavani) por el gol fantasma no concedido al Millonario, que pudo cambiarlo todo.
[–>El segundo superclásico de la temporada (en el primero de la fase regular hubo empate, 1-1, en el Monumental) se disputó en un escenario de muchísima más presión. Era un cara o cruz, que marcaría todo el primer semestre del año, jugado en un estadio neutral, en Córdoba, donde, por primera vez desde la final de la Libertadores 2018, en el Santiago Bernabéu, se reencontraban las dos hinchadas en las graderías.
El choque acabó escenificando un cambio de tendencia entre los dos grandes del fútbol argentino. El River Plate, de Martín Demichelis, que estaba practicando hasta ahora un fútbol técnico y vistoso se mostró demasiado inofensivo. Y lo pagó. Sale empequeñecido y con dudas
Por su parte, el Boca Juniors, irregular, llegaba con muchísimas dudas. Sin embargo, supo imponerse gracias a su brío, su madurez colectiva y una mejor lectura en un partido de altísima tensión. Y, claro, tuvo a su favor, la jugada clave del choque.
Iniciado el segundo tiempo, con 1-1 en el marcador, Lema acabó rechazando el balón hacia su propia portería. Chiquito Romero lo atajó… y aquí se montó el lío. El VAR, despuéssde una exhaustiva revisión, decretó que el esférico no había traspasado por completo la línea de gol. Las imágenes difundidas a las redes sociales, apuntarían lo contrario.
La eliminación de River es un durísimo golpe y el señalado es su técnico. A Martín Demichelis lo critican por haber sacado a Claudio Echeverri, en el minuto 60, para dar entrada a Esequiel Barco.
En el Boca la felicidad es infinita. Y quién personifica el éxito no es otro que Juan Román Riquelme. “Toda la semana estuve escuchando que Demichelis iba por su tercera victoria. Nunca pusieron que Boca iba a por la tercera eliminatoria consecutiva a River. Esto quiere decir que estamos haciendo las cosas bien”, expuso el ahora presidente.
“Lo más importante en los superclásicos es ganar. Y es maravilloso que sea con las dos hinchadas, es increíble. Ojalá pase más seguido. Nos hacen poca propaganda pero estamos felices. Por el grupo que tenemos, por jugar con nuestra gente, por este equipo. Se disfruta mucho. Mañana todos los bosteros vamos felices a trabajar y eso es maravilloso”, sentenció Román.
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El Boca va lanzado a por el título. Su próximo escollo es Estudiantes de La Plata que ganó a Barracas Central por 3-0. En la otra parte del cuadro, la otrasemifinall es Argentino Juniors-Vélez.
