Neymar Jr. no levanta cabeza. Sigue conviviendo con la rutina de lesiones que le impiden jugar con regularidad y alcanzar el nivel físico mínimo que le exige Carlo Ancelotti para regresar a la Seleçao.
Se confirmaron los peores presagios. El jueves se retiró del entrenamiento del Santos y, tras las pruebas de imagen, se constató que el ’10’ sufre un nuevo percance muscular, ahora en el recto femoral del cuádriceps, en la región frontal del muslo derecho.
Aunque el Peixe no se ha pronunciado oficialmente, las previsiones no son nada optimistas. Como mínimo estará un mes de baja, pero su ausencia de los terrenos de juego podría prolongarse hasta ocho semanas.
En la práctica, significa que Ney no estará con Brasil en la fecha FIFA de octubre, cuando la Canarinha realizará una minigira asiática. El viernes 10 tiene programado un amistoso contra Corea del Sur en el Estadio Mundialista de Seúl, y el martes 14 se medirá a Japón en el Tokyo Stadium.
Esta ausencia confirmada implica que Neymar Jr. cumplirá dos años lejos de la selección brasileña por problemas físicos. Un mazazo. Su última actuación con la Canarinha fue la fatídica noche del 17 de octubre de 2023, cuando, siendo jugador del Al-Hilal, se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda en la derrota por 2-0 contra Uruguay, en el Estadio Centenario, en partido de clasificación para el próximo Mundial.
Este nuevo percance pone en entredicho su participación con el Santos en la recta final de esta temporada. El conjunto que ahora dirige el argentino Juan Pablo Vojvoda está inmerso de lleno en la lucha por la permanencia. Arranca esta jornada, en la que disputará el clásico contra el Sao Paulo en la Vila Belmiro, con solo un punto por encima de la zona de descenso a la Serie B, donde estuvo en 2024.
Tercera lesión en seis meses
La secuencia de complicaciones musculares está impidiendo que Neymar alcance un desempeño regular. Ya son tres desde el mes de marzo. Esta última llega después de haber actuado en nueve de los diez partidos que ha disputado el Santos desde que se reanudaron las competiciones en Sudamérica tras el parón por el Mundial de Clubes de la FIFA.
Desde que se concretó su regreso al Santos en febrero, el astro ya ha estado dos meses de baja por dos lesiones. En marzo se quejó de dolor en el muslo posterior de la pierna izquierda, donde se le detectó un edema. Se perdió la fase decisiva del Campeonato Paulista, el inicio del Brasileirao y la fecha FIFA de marzo, que acabó desembocando en la destitución de Dorival Junior tras el naufragio por 4-1 ante Argentina en el Monumental de Núñez.
Recuperado, en su segundo partido salió llorando de la Vila Belmiro, donde solo pudo actuar 34 minutos contra el Atlético Mineiro. Se le diagnosticó una lesión en el músculo semimembranoso de la misma pierna izquierda y estuvo otro mes de baja. Solo reapareció a finales de mayo, por lo que Ancelotti, en su primera convocatoria, optó por no llevarlo para los encuentros contra Ecuador y Paraguay de clasificación para el Mundial.
Ahora se repite el escenario de incertidumbre sobre qué ocurrirá con Ney cuando solo faltan dos meses y medio de competición para finalizar el Brasileirao 2025.
