James Rodríguez resucitó en la Copa América 2024. Su carrera iba de capa caída y se presentó en el torneo continental, absolutamente desacreditado en el Sao Paulo, donde nunca ha logrado afirmarse como titular. Sin embargo, salió de Estados Unidos con la decepción gigante de haber perdido el título contra Argentina (1-0, gol de Lautaro Martínez) en la accidentada final de Miami, pero habiendo sido nombrado por la Conmebol como el MVP de la competición. El reconocimiento fue más que justo.
El ex del Real Madrid, que acaba de cumplir los 33 años, mostró que, si quiere, aún tiene calidad y fondo físico para marcar las diferencias. Fue elegido el mejor del partido en cuatro de sus seis actuaciones con la camiseta amarilla de los cafeteros.
De hecho, comparando las estadísticas de la Eurocopa y la Copa América que se disputaron simultáneamente, el colombiano es el futbolista con más participaciones en goles: son 7 (con un tanto de penalti y ¡6 asistencias!); por delante de los 5 de Lautaro Martínez (todos ellos goles con los que terminó artillero de la Copa América); Dani Olmo (tres tantos y dos asistencias); y el fenómeno Lamine Yamal (un gol y cuatro asistencias).
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Lo que entraría dentro de la normalidad es que el Sao Paulo esperara el regreso de James Rodríguez como si fuera la parábola del hijo pródigo. Pues no. Su futuro en el equipo del Morumbí, que ahora entrena el carismático técnico argentino Luis Zubeldía, es absolutamente incierto.
Sus éxitos a lo largo de la Copa América, donde fue el futbolista cafetero más destacado incluso por delante del cacareado Luis Díaz, fueron vistos como una traición por sus actuales compañeros de equipo, como la prensa paulista se encargó de difundir en múltiples confidenciales.
El escenario más plausible es que James no se vuelva a enfundarse la camiseta tricolor y que acabe llegando a un acuerdo con su actual club, con el cual tiene contrato hasta 2025, para seguir su carrera profesional lejos del fútbol brasileño.
De hecho, en febrero, se llegó a anunciar el divorcio, pero, al final, se recondujo su continuidad. En estos últimos meses, James ejerció más de futbolista de la selección colombiana, donde ya había cuajado buenas actuaciones, tanto en las Eliminatorias sudamericanas para el Mundial 2026 como en los amistosos de que propiamente de fichaje estrella del Sao Paulo.
La crisis cerrada en falso con un acuerdo salarial para pagar los atrasos, que ahora puede reabrirse. Ni James, ni el Sao Paulo se están presionando mutuamente sobre cuándo se producirá su regreso.
En Colombia se asegura, que el ’10’ maneja varias ofertas de Europa. Se ha hablado del Celta de Vigo, pero si James se ve con fuerzas y motivación para regresar al Viejo Continente podría acabar en la liga turca.
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El Besiktas, que ya intentó su fichaje en el mercado invernal, ha vuelto a la carga y, todo apunta, que podría acabar siendo su destino en las próximas semanas.