La aventura de Ronaldo Nazário en el Cruzeiro se termina. Esta semana, se anunciará oficialmente que el exfutbolista, de 47 años, dejará de ser el accionista mayoritario del club (en la actualidad tiene el 90% de la sociedad anónima deportiva) y, como consecuencia, abandonará la presidencia que ocupaba desde diciembre de 2021.
Ronaldo traspasa el club a manos de un cruzeirense de corazón, el empresario supermercadista, Pedro Lourenço, una figura muy conocida por toda la ‘torcida’ y la opinión pública en Belo Horizonte. En los últimos años, había invertido en la entidad ya sea con capital antes de la conversión en sociedad anónima, comprando derechos económicos de futbolistas que cedía al club, o, como ocurrió el año pasado, inyectando casi 20 millones de euros, que ahora transformará en acciones.
El acuerdo de la venta de acciones ya está cerrado. Pedro Lourenço, que nunca escondió su deseo de dirigir el club celeste, será el nuevo accionista mayoritario, pero se desconoce con qué porcentaje y si Ronaldo mantendrá una pequeña parte.
Lo que es seguro es que el exfutbolista y su equipo de trabajo dejaran la gestión del club y su día a día. Habrá plena colaboración entre las dos partes durante el período de transición.
Pedro Lourenço ya tiene su equipo de trabajo compuesto. Su hijo, Pedro Junior, será una figura importantísima porque tendrá plenos poderes y, gracias a él, se da por hecha la vuelta a la entidad del ejecutivo Alexandre Mattos, como director de fútbol, cargo que ocupó entre 2012 y 2014 y se le considera el arquitecto del equipo que ganó dos veces el Brasileirao (2013 y 2014).Se especula que el actual CEO de la entidad, colocado por Ronaldo, podría seguir.
La ‘torcida’ del Cruzeiro ha celebrado la salida de Ronaldo, que venía recibiendo críticas muy pesadas por cómo estaba gestionando la parte deportiva. Este domingo, en el Mineirao, antes del encuentro del Brasileirao ante el Vitoria, se extendió una pancarta en la que se podía leer “Tchau Ronaldo” (“Adiós Ronaldo”), sin agradecimiento alguno. La relación entre el ídolo y hasta ahora presidente y su público no era de las mejores.
El Cruzeiro vive un inicio conturbado de temporada, en el que fue eliminado de la Copa do Brasil por el modestísimo Sousa (un club desconocido en el panorama nacional) y perdió la final de la Campeonato Mineiro ante el eterno rival, el Atlético Mineiro, que se impuso por 1-3 en el segundo partido de la final, lo que provocó un cambio de entrenador.
Pedro Lourenço, en cambio, ha sido recibido con los brazos abiertos. Su pancarta en el Mineirao era mucho más afectiva que la dedicada a Ronaldo “Obrigado, Pedrinho” (“Gracias, Pedrinho”). Además, los torcedores llenaron una parte de la grada con bolsas de la cadena de supermercados propiedad del nuevo presidente.
Ronaldo se marchará del Cruzeiro habiendo cumplido solo una parte de su programa. Ha colocado la entidad financiera y administrativamente en orden, pero no ha realizado la inversión en fichajes que prometió.
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La Raposa subió volvió a la Serie A del Brasileirao en 2022, cuando se cumplió el primer año del Fenómeno en la presidencia y después de pagar una severa penitencia de tres cursos en la división de plata del fútbol brasileño. El año pasado logró la permanencia y obtuvo una plaza en la Copa Sudamericana, donde, de momento, suma tres empates consecutivos en la fase de grupos.
